Las empresas de fabricación de tamaño mediano que quieren ser competitivas en la Industria 4.0, necesitan ser eficaces en la consecución de sus objetivos clave, tales como maximizar la productividad o respetar los plazos acordados, entre otros.
Los indicadores clave de rendimiento (KPI) son elementos de medición cuantificables que las empresas pueden utilizar para lograr estos objetivos. Sin establecer KPI claros, una empresa no puede establecer plazos realistas, avanzar en la reducción de los atrasos o el exceso de inventario y determinar qué productos generan las mayores ganancias. Obviar los KPI hoy en día puede costar tiempo, dinero y clientes, y por tanto afectar al éxito de las empresas. Por eso a continuación vamos a ver algunos de los principales KPI para PYMES de fabricación.
Principales indicadores clave de rendimiento para empresas de fabricación medianas
Escoger los KPI correctos y usar las métricas adecuadas para monitorizarlos es fundamental para que la transición a las tecnologías 4.0 valga la pena. Si bien no todas las empresas tienen las mismas necesidades, los KPI más relevantes para compañías de fabricación media son los siguientes.
- La eficiencia general de los equipos (OEE)
La eficiencia general de los equipos es el punto de referencia para medir la productividad de las empresas manufactureras en la Industria 4.0. Mide la tasa de funcionamiento de sus máquinas frente a su máximo potencial.
Los tres criterios principales para este indicador son:
-Disponibilidad de los equipos: monitorizar las paradas de producción planificadas y no planificadas y su duración.
-Rendimiento del proceso: supervisar el tiempo del ciclo y determinar los factores que hacen que la producción funcione a ritmos por debajo del óptimo.
-Calidad: porcentajes de unidades buenas o rechazadas producidas por producción. Capacidad real para producir sin defectos.
- Respeto de los plazos de entrega
El respeto de los plazos de entrega se garantiza dentro de un período de tiempo alrededor a una fecha de vencimiento fija. Los tiempos de entrega generalmente se establecen en función de las necesidades de la línea de producción y el flujo de caja. Una vez fijada la fecha de entrega hay que respetarla. Varios factores, incluido el tiempo de compra, el tiempo de fabricación y los problemas de suministro, afectan la entrega a tiempo. Un sistema ERP integrado ayuda a las empresas de fabricación a controlar y gestionar los factores que afectan la entrega a tiempo mediante el seguimiento del historial de compras, los detalles de facturación y envío, la información contable y los detalles de gestión de la cadena de suministro.
- El margen de beneficio medio
El margen de beneficio medio se refiere a los márgenes de beneficio brutos, operativos y netos medios a largo plazo. El seguimiento de estos márgenes puede ayudar a las empresas a centrarse en las ganancias en lugar de en los ingresos, y ayuda a determinar las áreas en las que hay potencial de mejora.
El seguimiento del margen de beneficio medio, en lugar de limitarse a los márgenes brutos, los márgenes operativos o los márgenes de beneficio neto, permite a los gerentes tener una imagen completa de los costes e ingresos y les ayuda a pronosticar el flujo de efectivo disponible y les proporciona la información que necesitan para tomar las decisiones para guiar las estrategias de producción y marketing a corto y largo plazo y garantizar el máximo beneficio.
- La gestión de trabajos en curso
Los trabajos en curso son productos que han iniciado el proceso de fabricación, que ya no son materia prima pero que aún no son productos terminados. Un excedente en el trabajo en proceso es indicativo de problemas en la cadena de suministro o en la de producción, e incluso pequeñas cantidades de trabajo en proceso significan grandes cantidades de dinero inmovilizadas. La implementación de medidas para mantener el trabajo en progreso a un nivel óptimo aumenta la productividad y reduce los costes. Las medidas de producción ajustada, incluido el principio de just-in-time, son sistemas de gestión que ayudan a supervisar y gestionar el trabajo en curso y hacer que la fabricación sea más eficiente.
Just-in-Time es un sistema que fue diseñado para aumentar la eficiencia y reducir el desperdicio al garantizar que se tengan las existencias que se necesitan para satisfacer la demanda, sin excedentes. La gestión de inventario justo a tiempo ayuda a las empresas de fabricación a mapear y optimizar su cadena de valor, creando flujos e implementando un sistema de flujo de extracción. Esto reduce los costes de mantener inventario, mejora el flujo de efectivo y disminuye el inventario no utilizado.
Sin embargo, la implementación justo a tiempo requiere niveles de inventario continuamente bajos, un sistema de pronóstico de demanda preciso que integre el inventario y la información de la demanda de los clientes. La integración de sistemas necesaria para implementar just-in-time es típica de las tecnologías que las empresas de fabricación necesitan en la era de la Industria 4.0.
- Supervisar y gestionar la excelencia
Para las PYMES de fabricación que desean competir en el mundo de la Industria 4.0, es esencial identificar e implementar KPI para reducir costes y optimizar el inventario y la producción. La rentabilidad global, el respeto de los plazos de entrega, el margen de beneficio medio, la gestión de los trabajos en curso y la implantación del just-in-time son algunos de los indicadores clave de rendimiento, los más importantes para las empresas manufactureras.
La monitorización y la administración de KPI de vanguardia requieren la integración de sistemas automatizados y la conectividad en tiempo real para anticipar averías de las máquinas, la cadena de suministro y los peligros del inventario o el cumplimiento de los cronogramas, lo que permite tomar decisiones inteligentes, dinámicas y proactivas para el negocio.